Tu guía para establecer poderosas intenciones de crecimiento personal

Embarcarse en un viaje de cambio o comprometerse con un nuevo objetivo puede ser emocionante, pero a menudo viene con un toque de intimidación. Tanto si quieres cultivar la gratitud en tu vida diaria, dar prioridad al bienestar integral o liberarte de lo que ya no te sirve, establecer intenciones es una herramienta poderosa. Sin embargo, si no sabes por dónde empezar o cómo articular tus intenciones, ten por sentado que no estás solo.

Las intenciones son ideas o valores que puedes fijar y llevar contigo durante toda la vida. Además, pueden establecerse en cualquier momento del día. Para desmitificar el arte de establecer intenciones, nuestro Equipo de Wellness ha proporcionado más información sobre qué son las intenciones, por qué añaden significado y valor a tu día a día, cómo establecerlas y cómo hacerlas realidad. Esto es lo que necesitas saber.

¿Qué es una intención?

Una intención es un principio rector o un propósito que refleja tus valores, aspiraciones y deseos. Sirve como brújula para tus acciones y decisiones, dirigiéndote hacia un determinado estado o forma de vida. Las intenciones se centran en el momento presente y hacen hincapié en el viaje más que en el destino. Proporcionan un marco para la forma en que quieres aparecer en el mundo y conforman tu mentalidad general y tu enfoque de la vida.

Por otro lado, una meta es un objetivo específico, mensurable y con un plazo determinado que uno se esfuerza por alcanzar. Las metas suelen ser tangibles y concretas, con un punto final o resultado claro. A diferencia de las intenciones, que hacen hincapié en el proceso y la mentalidad, los objetivos suelen hacer hincapié en el resultado o el logro deseados. Los objetivos proporcionan dirección y motivación, ayudándote a mantenerte centrado y a seguir tu progreso hacia una meta específica.

Ventajas de establecer intenciones

¿Alguna vez has tenido la sensación de que tu vida cotidiana transcurre sin más? La vida puede llegar a ser tan ajetreada que parece que uno se limita a sobrevivir cada día, tachando tareas de la lista sin una sensación clara de progreso. Es un sentimiento con el que muchos pueden identificarse, pero también puede hacer que te sientas estancado o incluso agotado. Aquí es donde la práctica de establecer propósitos puede marcar una diferencia significativa.

Establecer intenciones es una poderosa herramienta para reajustar tu mentalidad. En última instancia, las intenciones actúan como una brújula que te guía hacia tu propósito y tus valores, y te ayuda a navegar por la vida con claridad e intencionalidad.

Cómo establecer intenciones

Has reconocido la importancia de actuar de forma deliberada, pero ¿por dónde empezar? Aquí tienes algunos pasos que te ayudarán a empezar:

Identifica tus valores: lo que es importante para ti. Reconoce que tus valores e intenciones son personales y deben reflejarte a ti mismo.
Definir lo que hay que cambiar: prácticas reflexivas como escribir un diario, meditar o entablar conversaciones significativas con un amigo que te den energía y te inspiren. Una vez identificados nuestros valores, podemos pensar en lo que ya estamos haciendo para vivir en consonancia con nuestros valores y en lo que no estamos haciendo. A partir de ahí, podemos identificar lo que hay que cambiar. Piensa qué te ayudaría a llenar esas lagunas.
Sé flexible: recuérdate a ti mismo que las intenciones no son objetivos rígidamente definidos con planes meticulosamente trazados. Pueden ser grandes o pequeños, y cambiar diaria o mensualmente.
Hazte responsable de ellas: ponlas por escrito y colócalas en un lugar visible de tu hogar. Piensa en lugares como el espejo del baño o el monitor del ordenador, donde interactúas con frecuencia. Este refuerzo visual sirve de recordatorio constante y garantiza que tus intenciones permanezcan en primer plano.
Pon en práctica tus intenciones con regularidad. Ten en cuenta que la puesta en práctica no siempre será fluida, ya que las exigencias de la vida pueden interrumpir ocasionalmente tus esfuerzos. Con perseverancia, poner en práctica tus intenciones se convertirá en algo más natural y, en última instancia, dará forma a la vida que deseas.

10 ejemplos de intenciones:

No existen directrices estrictas para establecer intenciones. Tus intenciones serán únicas para ti y reflejarán tus deseos y aspiraciones individuales. Sin embargo, si buscas inspiración para empezar, aquí tienes algunos ejemplos:

Tengo la intención de escuchar activamente antes de ofrecer mi opinión.
Tengo la intención de dejar de tomarme las cosas como algo personal.
Me propongo manifestar la felicidad de forma natural.
Me propongo ver la bondad que me rodea.
Me propongo ser amable incluso bajo presión.
Me propongo hacer sonreír a alguien cada día.
Me propongo hacer de la atención plena una parte importante de cada día.
Me propongo suspender el juicio y aceptar la vida tal como es en el momento.
Me permitiré ocupar espacio y ser yo mismo.
Me propongo profundizar la conexión en mis relaciones.

Conseguir tus propósitos:

En Shanti-Som Wellbeing, creemos que en lugar de escabullirse a expectativas poco realistas, abogamos por establecer propósitos para 2024 que sean realistas, motivadores y alcanzables. Es esencial dar prioridad a los propósitos que nos levantan el ánimo y mejoran nuestro bienestar, en lugar de a los que nos dejan agotados.

Enfoca el establecimiento de intenciones con una mentalidad de crecimiento. Una mentalidad de crecimiento implica reconocer tu capacidad para crecer y desarrollarte mediante el trabajo duro, las buenas estrategias y las aportaciones de los demás. Podemos empezar reflexionando sobre lo que nos enorgullece y hemos logrado en el último año, y pensar en cómo queremos crecer en el próximo.

Cuando se trata de conseguir tus propósitos u objetivos, los estudios han demostrado que compartirlos con amigos o familiares puede ayudar a mantenernos responsables y más comprometidos. ¿Por qué no hacer lo mismo con las intenciones? Pídele a un amigo de confianza o a un familiar que comparta tus valores que se una a ti para establecer intenciones juntos. Puede ser una forma de reforzar los vínculos y de apoyarse y recordarse mutuamente a lo largo del año.